lunes, 6 de febrero de 2017

Palo




La SD Ourol atraviesa unos momentos dónde todo parece ir en su contra. Muchas veces escuchamos que el fútbol es de rachas y a veces por mucho que merezcas, si el balón no quiere entrar, no logras ganar.


El partido que nos enfrentó al Cervo tuvo bastante que ver con la afirmación anterior. Pese a que el conjunto ourolense tuvo un juego poco fluido, dispuso de muchas y buenas ocasiones, pero bien por falta de puntería o bien por los postes, no lograron perforar la meta local.


Desde los primeros minutos, el Ourol , llevó el peso del partido y dispuso de varias ocasiones que no lograron materializar, mientras que los locales fiaban su suerte a la velocidad de sus contras.



En el minuto 33, Miguel Gomes iba a ser expulsado después de recibir la segunda amarilla en una entrada muy dura a Jose Carlos. El partido se ponía de cara para los ourolenses, pero no iba a ser nuestro día.

Tras la expulsión, los locales se encerraron un poco más si cabe y no crearon excesivo peligro a la meta defendida por el debutante Fanego.

En el minuto 66, los locales lograban arañar un córner, que iba a ser rematado por Semedo, el balón acariciaba el palo y se introducía en la meta ourolense. Palo para los visitantes, que veían como encajaban gol en el primer tiro entre los palos.

De aquí al final, más de lo mismo, ocasiones ourolenses y hasta 4 balones a los palos.

Sin ser de lejos nuestro mejor partido, merecimos mucho más.

Quedan CINCO partidos, CINCO finales y este equipo tiene y va a demostrar que tiene orgullo. En las buenas y en las malas, siempre juntos y con una afición que nos les va a fallar.




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