Gran partido disputado por nuestra
SD en el Municipal de
Abadín.
Nuestro equipo rompió en mil pedazos la tendencia a salir fría a los terrenos de juego en los primeros minutos de juego. Esta vez no. Salió a por todas, a comerse el
Abadín. Sin contemplaciones. Julio tuvo la primera en el primer minuto pero su vaselina se fue arriba. El estilo de los visitantes se impuso de forma nítida. Todo el mundo pensaba que el gol estaba al caer y que sería de una jugada nuestra, sin embargo viene de un error de los locales.
Fran, le entrega un balón envenenado a un defensa de espaldas, éste es presionado por
Zeus, recuperando el balón y resolviendo con frialdad. Sin ponerse nervioso. Como los grandes. Los errores del rival hay que provocarlos. Claro que sí. No se había llegado al minuto 10. Perfecto.
Siguió la
SD, con el mismo ritmo, con la misma intensidad, algo que nos encanta.
Tichy,
Payu,
Kiños asociándose en el medio. Haciendo lo que quisieron. Julio, con sus internadas por la izquierda. El 2º estaba al caer, pero faltó en esos compases del partido precisión en el último pase y en la definición. Algo que por lo que no hay que preocuparse. El juego te lleva al gol. El estilo te lleva a la victoria. Ya llegaría. Y llegó. De balón parado la pegó
Payu y el rechace tras
paradón de
Fran lo aprovechó
Tichy para cruzar el balón. 0-2. Resultado muchísimo más que justo.
Lamentablemente, llegado este momento hay que hablar de
Josep Hernández Mouzo. El trencilla vio que en el partido el fútbol era el único protagonista y eso es algo que no puede soportar. El protagonismo va en sus genes. Dejó de señalar claras faltas a favor de los nuestros tras endurecer el partido el
Abadín y las protestas justas, legítimas y con toda la razón de nuestro míster fueron sancionadas con amarilla y roja
prácticamente seguidas. Vienen recogidas en el acta pero nuestro físico no nos permite reproducir la lamentable ortografía del colegiado de forma pública. De nada,
Sr Mouzo. Dicho ésto, el partido llegó al descanso.
La 2ª parte dejó, si cabe, un dominio más acentuado de los visitantes. El único pero, las ocasiones desaprovechadas y que hicieron sufrir a la parroquia
ourolense. Julio, en mano a mano, Marco de cabeza y a pase de la muerte no acertaron a batir a Serafín. Y, como el que perdona paga, los locales acortaron distancias por medio de Suso. Puro espejismo. El dominio era de los visitantes.
Zeus, de disparo al palo largo y a la escuadra puso la sentencia.
De ahí al final, más de lo mismo. Muy destacable la entrada de Chicha al campo. En una contra se adelantó al portero local para, con un toque sutil, poner el 1-4 definitivo. Primer gol de la temporada. Lo celebró con el "
Ai se
eu te pego". La canción de moda. La ocasión bien lo merecía.
Los cracks: Imposible mencionar a alguien. Todo el equipo merece esta distinción. PAR-TI-DA-
ZO.